miércoles, 13 de julio de 2011

Efecto mariposa


Una vez un hombre casi llegando a los 80 descubrió que tenía un don.
Y era que podía volver en el tiempo con toda su sabiduría y
cambiar su presente. Empezó a utilizar este don y lo primero que se le vino a la mente fue buscar un diario de su juventud donde aparecía el número de la lotería.
Regreso al pasado y empezó a caminar por las calles de su vieja
ciudad, miraba maravillado los modelos de los autos y sentía el aroma a pollo que salia de la casa de Pocha.
Sin mas demoras recordó el número de la lotería y lo jugó. Se hizo millonario
pensando que su vejez la pasaría mejor.
Pero resulto que tuvo un
impulso y perdió todo su dinero en los caballos. Él pensaba ¿cómo puedo cometer semejante error? si ya soy un hombre sabio.

Volviendo a sus 80 y pensando un poco mejor las cosas, se dio cuenta que no
le servía de nada tener dinero de viejo, si así como estaba, estaba bien.

Entonces recordó un viejo amor perdido, "esa joven era tan egoísta..."
Regresó y volvió cortejarla de la misma manera que lo había echo en su juventud,
disfrutaba mucho de las miradas, de las sonrisas y la belleza de su rostro.
V
olvió a conquistarla a la salida del cine, quiso cambiar su manera de pensar y lo logró, pero jamás jamás pudo cambiar su sentir.

Luego regreso para intentar evitar la muerte de su padre, volvió a sus 29 años.
y por mas que haya estudiado el caso de su padre y que sepa de todos los adelantos tecnológicos, nunca podía salvarlo. Ahí sintió que la vida es como una cadena que se corta por el eslabón mas débil y sin avisar.

Decidió ultizar su don para ayudar a otras personas, ya que con él no funcionaba.
Quiso detener injusticias que veía, ignorancia, hambre.
Pero si salvaba a alguien pronto caía y sus esfuerzos quedaban estériles.

Ofuscado pensó que no era un don, mas bien una maldición, o no sabia como utilizarlo.

En un momento de lucides, llegó a conclusiones tales como que las cosas no pasan porque sí, que hay personas que viven del
pasado, que hay personas que quieren olvidarlo, y que este frío incontenible es la realidad.
Pero también hay personas que recuerdan el pasado, aprenden de él, que se esfuerzan por mejorar un poco cada día,
que lo malo no es que no se repita algo bueno, que lo malo es no intentarlo nunca mas.

Entonces regresó a sus 80, y llamó por teléfono a un viejo amigo del alma. Se sentaron en un café y empezaron a contar anégdotas una tras otras de sus vivencias. De los días fáciles, los días difíciles, de las alegrías y tristezas, de los aciertos y errores. Cómo fue que llegaron a viejo y cómo es que tienen a sus nietos sentado en chinito, escuchando sus maravillosas historias.

5 comentarios:

  1. MARAVILLOSA TU HISTORIA Y CON UNA BUENA ENSEÑANZA
    UN ABRAZO!

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  2. "...la vida es como una cadena que se corta por el eslabón mas débil y sin avisar..."

    Con tu permiso me llevo esa frase para meditar profundamente!

    P.D.:La vida de cada uno de nosotros tiene un destino,un azar que no puede modificarse porque en cierta forma el mismo esta siempre enlzado a alguien mas...

    BESUCOS CON EFECTO REBOTE ;-)

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  3. Lao muchas gracielasss, otro abrazo
    Gabu, lleve no mas, me alegra mucho tus decires y refleja un poco lo que quice decir..

    besos con ecos!!!

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  4. Si todo lo que vivimos a lo largo de nuestro camino, no nos sirve para crecer, afrontar los golpes que recibimos y prepararnos con un pie adelante del otro para no dejarnos voltear por los que vendrán y,a la vez, para disfrutar todo lo bueno, no vivimos Simplemente pasamos por el mundo casi sin dejar sombra
    Muy bueno tu relato.Me dejó conmovida

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