domingo, 20 de febrero de 2011

La busqueda del poder mágico

Mientras el joven estaba en la búsqueda de fuerzas, se da cuenta que ya posee sus propias limitadas fuerzas, y cae a cuentas que jamás le serán suficientes...

Para cuando no pueda ver
Para cuando las esperanzas se la hagan escasas
Para cuando las heridas se le abran con cada recuerdo
Para cuando las caídas no se le amortiguen con nada
Para cuando el camino se le endurezca
Para cuando el sacrificio no le de frutos
Para cuando se le amargue el dolor
Para cuando se le quede sin nafta el motor
Para cuando se le termine la paciencia
Para cuando se le mojen las alas
Para cuando la pasión no lo logre levantar
Para cuando le pierda sentido a la sencillez
Para cuando sienta que cada día estará nublado
Para cuando un "no" le frene los pies
Para cuando le salga un sol sin luz
Para cuando su hipocresía le coma lentamente
Para cuando se sienta humillado por cualquier pequeñez
Para cuando cuestione voluntades divinas

Entonces se dice: -"Necesitaré de un poder mágico para cada momento" (mientras se pone una mano en la barbilla y la rasca con suavidad).

-"¡¡Silencio!! no podrás conseguir ese poder mágico tan fácilmente"
(repentinamente frunce el entrecejo).

Como en un momento de claridad se dice: -"Buscaré otras opciones" (que se oscurece rápidamente por la próxima pregunta que se hará).

-"¿Dónde?" (y se inclina como extenuado apoyando sus manos sobre las rodillas).

Pasaron unos pocos días cuando empezó a recordar cosas de su pasado, de sus vivencias y también las de otros, y algo empezó a titilar muy tenue.
Entonces, fijó su mirada en un viejo bastón de madera que a su abuelo ayudaba a caminar.
Y recordó que alguna vez había encontrado un tesoro infinito, cuando se le vinieron unas palabras que decían: "Si alguno quiere venir en pos de Mi, niéguese a si mismo, tome su cruz cada día, y sígame"
Cada día que pasaba iba acrecentando su poder mágico mágicamente, aunque sin darse cuenta que sus fuerzas no provenían de él, sino de almas silenciosas que lo rodeaban a cada momento.
Finalmente dijo: -"Quedate por acá. No hace falta hablar, esos ojos ya hablaron. Y lo demás... demás está. Quedate por acá"
Y pudo tener un poco de paz.

4 comentarios:

  1. ¡eso Esteban! no hay otra alternativa mas importante que TOMAR LA CRUZ. El gran misterio es que a todos nos pesa lo mismo y nos reditúa lo mismo, si es que somos dóciles. UN ABRAZO ENORME.

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